miércoles, 15 de marzo de 2023

¿Y si todo tuviera un final?

 A veces me pregunto cómo será el final de mi vida. Si será bueno, si habré conseguido algo de lo que deseo, si con el tiempo llegaré a ser feliz... y si será pronto.

Hace tiempo que no escribo nada, y no será porque no tenga nada que contar, más bien todo lo contrario. Me encuentro en un momento de encrucijada en mi vida, con la sensación que las decisiones importantes que tendré que tomar tendrán consecuencias inesperadas, pero no para bien precisamente.

Los últimos 9 meses están siendo una montaña rusa de emociones, tengo momentos buenos y momentos muy malos. ¿Los motivos? Pues muchos.

Motivos o sucesos de los últimos 9 meses.

- El más importante sería que nació mi cuarto hijo, Keanu. No creo que estuviera preparado para ello, a pesar de haber tenido muchos meses para hacerlo. No tengo ganas de cuidarlo, y ahora mismo es mi principal ocupación por motivos que luego contaré. Hasta los 2 años no me he sentido lo suficientemente a gusto con mis otras hijas, solo que ahora estoy chocando con una realidad que me trastoca mucho mi mente. Y sumando a las otras tres niñas, a veces es todo una locura, he acabado muchos días con dolores fuertes de cabeza, frustrado por que siento que me queda grande tantos hijos, el no poder controlar lo que sucede... y que mi mujer tampoco está para tirar cohetes con la situación, aunque creo que lo lleva mejor que yo, aunque sólo sea un poco mejor.

- El siguiente motivo en importancia es relativo a médicos y trabajo.

Llevo sin trabajar prácticamente desde el 5 de Junio, salvo dos días en noviembre, y que de verdad fueron sólo 2 días. Todo el resto del tiempo ha sido baja paternal, vacaciones, lactancia y desde el 2-3 de noviembre, baja médica. 

La baja médica se debe a un problema que empezó en la muñeca, pensaban que era túnel carpiano pero no lo ha sido. El dolor sube desde la muñeca más o menos hasta la mitad del antebrazo. También ha salido de esto una epicondilitis, que me limitan movimientos en mi brazo derecho. Es imposible no forzar aunque sea un poco cada día, me duele al conducir, al hacer pinza durante más de 1 minuto (a veces menos de ese tiempo), por fregar una sartén, por levantar peso, hasta por subirme la cremallera del abrigo. Podría estar toda la noche comentando todo lo que hace que me duela la zona de la muñeca o la epicondilitis del codo. Es extremadamente frustrante. 

Soluciones, pues de momento reposo y rehabilitación cuando sea posible, y si no ya se baraja la posibilidad de operación, algo que me afecta mucho. De hecho tengo dos operaciones pendientes, una de varices que me duele mucho la pierna desde hace al menos dos años, y otra de vasectomía, por eso de no repoblar mi mujer y yo solos el planeta.


Una vez entrado en los principales motivos, ahora me encuentro que estaba buscando trabajo, salen ofertas interesantes pero no puedo aceptarlas sin asumir que tendré dolor en brazo y pierna siempre que vaya a oficina durante meses antes de plantearme una operación. Igualmente, en mi cabeza está la idea que si me opero, sobre todo del brazo, acabaré igual o peor de lo que estoy, pero tal como están las cosas ¿Tengo alternativa?

Lo importante es lo siguiente. En mi cabeza pasan muchas cosas, como que vivo amargado de estar en casa, cuidando en la medida de lo posible de mi hijo, llevando a las niñas al colegio, haciendo comidas, recogiendo la casa... me siento más sirviente que padre. Mis hijas cuando no la lía una la lía otra, y si no el bebé tiene un mal día y estás jodido igualmente. Mi mente está llegando a un punto de fractura, en la que el principal apoyo es mi mujer, pero en ocasiones como ayer es más motivo de ruptura que de apoyo. Empiezo a pensar cosas como si me pasara algo qué pensión le llegaría. Si de verdad me echarían de menos o simplemente con contratar una persona que se encargara de los niños y de limpiar un poco sería suficiente para que no me se acordaran de mi. Los días que pienso lo segundo, son los que si tengo que conducir soy algo más temerario (siempre y cuando vaya solo) o me asomo al balcón y pienso si moriría al impacto o podría llegar a sobrevivir, en tales condiciones que destrozaría más a toda la familia.

¿Buscar ayuda psicológica? Lo intenté por la seguridad social cuando sólo era estrés y ansiedad. Ahora no sólo tengo un nivel espectacular de eso, sino que le sumo el querer desaparecer, o el no tener motivación ni para escribir esto. 

Lo anecdótico de esto es que escuchar música disco de los 90 es de las pocas cosas que me anima. Leer cómics también ayuda pero cuesta muchísimo encontrar tiempo antes de cenar, ya que después entre todas las cosas que tengo que hacer, ya no tengo ganas de nada. 

Hay tantas cosas que me quedo sin comentar, como que he cogido mucho peso, he llegado a los 108 kgs, y el método que se me ha ocurrido más adecuado es dejar de comer. Así he bajado hasta los 104 aproximadamente, pero ya casi nunca desayuno ni como nada hasta la comida del mediodía, y luego la mitad de los días no como nada más. Hago dos comidas de media, sin picar entre medias, y la idea es hacer una sólo. También he dejado de comprar Coca Cola desde el 6 de enero, sólo bebo si me da mi madre o un día que fuí al cine. (A mi madre la puedo ver como mucho una vez al mes, aunque pueden pasar 3 meses sin verla y no siempre me llevo Coca Cola de su casa).

Para acabar, sólo comentar que me da igual no comer, me da igual que me duela el brazo o la pierna, me da igual no encontrar algo que me motive claramente, me da igual no tener alguien de fuera de casa que me llame para ver cómo estoy, me da igual no tener apoyos y lo que más me da igual es lo que me pueda pasar en el futuro. Si empieza una guerra mundial, un virus zombi, nos invaden los extraterrestres... quizás así me empiece a importar algo, porque a día de hoy lo que hago es intentar pasar el día y que pase cuando antes. Me cuesta mucho irme a dormir, pero porque si me voy a la cama, lo siguiente que veré es como empieza otro día, y no quiero levantarme para lo mismo, para esta vida que a día de hoy no me hace feliz. 

PD: Mentiría si dijera que nada me hace feliz, pero los momentos de felicidad son cada vez más cortos y más escasos, tanto, que muchos día no recuerdo ni un momento así en todo el día. :(

PD2: Otro día, espero que sin esperar tanto, comentaré cosas sobre un libro que estoy leyendo "Por si las voces vuelven" del cual hay detalles con los que me siento identificado, y otros en los que si sigo así, podría acabar igual que el autor.