domingo, 23 de abril de 2017

Reflexiones de una temporada extraña

Una noche tranquila... que me ha hecho escribir ahora porque ya es demasiado tiempo sin una nueva entrada en el blog y porque hoy he encontrado ganas para escribirla.

Muchas cosas han pasado, cambio de trabajo, problemas familiares, problemas con bancos y salud algo tocada a raíz de alguna de estas cosas.

Respecto a temas familiares, pues mi abuela falleció el 16 de Diciembre pasado, estaba bastante mal, no se movía ya de la cama por sus problemas físicos y no estaba ya para muchos trotes, como se suele decir. No me alegré para nada de su muerte, pero creo que es la primera vez que fallece un ser querido y no me sale ni una lágrima por ella. No sé exactamente qué significa, salvo que no la tenía el mismo afecto que a otros familiares difuntos, pero hasta cierto punto sentí algo de alivio, ya que mi relación con ella no era buena y mi mujer no la soportaba mucho por cosas que mi abuela decía de ella.
Una vez fallecida mi abuela empieza otro problema, y es la herencia, que si no me equivoco mucho en mis conocimientos de derecho, no se va a hacer bien si no se aplican las herencias de mi padre, de mi tío, y creo que también de mi abuelo, pero como hemos llegado a un acuerdo entre los seis que salimos en el testamento pues prefiero dejarlo así y ver si finalmente recibo esa parte y me olvido del asunto. Y claro, comentar que mi abuela ha hecho un testamento en el que los herederos de sus dos hijos difuntos (mi padre y mi tío) nos llevamos lo menos posible legalmente y mi tía y sus hijas se llevan alrededor de 7/9 partes del total. Pero bueno, la verdad es que me esperaba algo así.

Los bancos: El problema con el banco está relacionado con un local heredado de mi padre el cual llevábamos unos 4 años sin pagar la hipoteca, principalmente porque no podíamos. Había aviso de embargo, procedimiento judicial al respecto por ambos lados, ellos reclamando hipoteca y nosotros claúsula suelo, y bueno, al final, parece que se va a arreglar, y se van a quedar con el local, aunque quedan detalles que no están cerrados pero pinta bien la cosa, espero no equivocarme. Ha sido un dolor de cabeza durante muchos años, muchas llamadas de cobradores molestando y acosando y bueno, al menos parece que esto acaba.

En casa las cosas no están todo lo bien que me gustaría, y en buena parte es debido a la cantidad de horas que realizo en el nuevo trabajo, el cual está bien en muchas cosas pero no precisamente en tiempo libre como me pasaba en Pachá o Fortuny.
Del trabajo qué decir, hoy mismo me he llevado una decepción al confirmar de manera inequívoca que se trata de un patio de marujas en el cual cualquier cosa puede ser utilizada en tu contra y que todo lo que digas se propaga de manera escandalosamente rápida en tiempo récord.
Hay cosas buenas, el sueldo y las propinas están bastante bien, y aunque aún no estoy en la zona para la que me contrataron porque está habiendo retraso para su inauguración, llevo bien dónde estoy ubicado. El problema son los horarios, que yo iba a trabajar sólo de noche y muchos días me toca ir por la mañana o mediodía y no veo mucho a Sheila y las niñas, y eso me trae problemas, aunque éste último mes por distintos motivos son algo mejores los horarios.

Esto es un breve resumen de la situación, a ver si algún día encuentro tiempo para detallar muchas cosas, sobre todo mi ánimo y mi salud, que creo que está emporando poco a poco por falta de descanso y stress mayor del que me gustaría.

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