viernes, 4 de julio de 2008

Historia de un friki viajante

Existe un chico, de unos 21-22 años, al cual le gusta viajar. Algunos se preguntarán... ¿que cojones me importa eso? Pues si no te importa deja de molestar, vete a tomar por culo y permite que pueda seguir escribiendo para el que le interese.

El chico, por llamarle de alguna manera, pues... Ramón, queda bien y tiene unas cuantas rimas si surgiese la oportunidad, jejeje.

Ramón, un chico de 21-22 años, que se considera friki porque lee comics y ha participado en un foro donde se escanean y traducen esos mismos comics, le gusta viajar, pero no de la misma forma que a los demás. Concretamente ha ido a bastantes sitios, Moscú, China, Budapest... y otros cuantos más que ahora mismo no recuerdo, pero el último sitio al que va a ir(por el momento) es a Serbia.
¿Y qué coño hay en Serbia? Pues no lo tengo muy claro, así que voy a contar lo sucedido en el día de hoy en Madrid, dónde he pasado unas cuantas horas con él y que hemos hablado de esa y más cosas.

18:34 PM, me despierto con la alarma del móvil, y veo un mensaje. Se trata de Ramón, un amigo asturiano que ha venido a Madrid y quiere ver si puedo quedar un rato. Le llamo, y quedamos alrededor de las 19:30. A esa hora, cuando le veo, observo sutilmente* que se ha cortado la melena, le saludo y nos vamos a hacer el friki a una tienda de comics cercana.
*Sutilmente significa que nada más verle, al otro lado de la calle Alcalá (calle muy transitada por vehículos y personas) se quita la gorra y dice en mitad de un cruce "Eh tío, ¿has visto? ¡¡me he cortado el pelo!!" mientras le indicaba que se quitara del medio de la carretera que el semáforo estaba a punto de ponerse en rojo.

Llegando a la tienda, cotilleando sobre el mundo que nos rodea, que si 52 es una mierda, que si vaya con la gente como se raya por tonterías, que cachodeo en año pasado en Expocomic, el año que viene los del Bulldam al final nos van a pegar... empezó a comentarme acerca de los motivos para irse a Serbia. Resulta que va de monitor, sí, algo increíble de creer si le conocierais, pero es verdad, va de monitor de chicos de 16 a 18 años creo recordar. ¿Por qué a Serbia? Pues porque surgió, sin más, no era caro y no le pareció mal sitio.
En fin, nos vamos a tomar algo y seguimos hablando del tema.
Ramón:¿sabes algo curioso?
Yo: Sorpréndeme.
Ramón: No voy directo a Serbia, paso por Macedonia, que quiero conocerlo, pero después me he enterado que el viaje a Serbia es de 400Km´s en autobús y, ¡¡¡Dura 8 Horas!!!
Empecé a descojonarme y a acordarme de algunas películas, donde viajan en autobús por una carretera, donde el trozo más liso es de 2 metros, lleno de tierra y piedras, y donde los pasajeros llevan gallinas, cabras, pollos y vete a saber qué leches cantan en griego.
Ramón: (riéndose) Cabrón, no te rías, que menudo viaje me espera...
De repente me vino algo peor a la cabeza, y no tuve más remedio que decirlo.
Yo:¿Has pensado en una cosa?
Ramón: ¿El qué?
Yo: Pues que Yugoslavia ha salido hace pocos años de una guerra civil y que la frontera es probable que siga sembrada de minas antipersona.
Ramón: (entre risas)¡¡Eres un cabrón!! ¿Cómo dices eso? además, seguro que ya no hay de eso.
Yo: Nada, tranquilo, si ves que en la carretera hay socavones, ponte en la parte de atrás del autobús, por si acaso... pero cuidado con Zorba y sus gallinas.
Ramón:(descojanao de la risa)Ya te vale, pero quizás mejor al lado del conductor, que si hay minas seguro que se preocupa por que no le exploten a él...
Yo: Pues sí, es otra opción.

Después de esto, pasamos por casa de sus tíos, donde íbamos a estar unos minutos y acabamos cenando allí. Flipé cuando entré en la casa, yo no quería, pero Ramón se empeñó y cuando vimos a sus tíos y a alguien de visita, parece que no les hizo mucha gracia, es más, me quedé blanco cuando le echaron una pequeña bronca a Ramón por algo sin mucha importancia.
Cenamos, un poco "pillados" por la situación y nos fuimos a tomar algo. Después me enteré que no pasaba nada, que les pillamos en un mal momento pero sin importancia real, nada más.
Salimos por huertas, una zona de Madrid donde existe un pequeño local donde trabaja una amiga mía, y nos invitó a unas 4 ó 5 rondas(y porque no tomamos más :P). Ramón, después de 4 ó 5 Vodkas con Limón, de los cuales los dos últimos eran 3/4 partes Vodka y el resto de limón, el viaje en avión lo tomará más relajado.
Allí, entre risas, recordatorios de los campos de minas, y anécdotas de sus viajes, como por ejemplo el concurso de chupitos de absenta de Budapest, pasamos un buen rato con mi amiga, la cual participó en nuestra conversación mientras el trabajo se lo permitía. Gracias Rebe por las copas ;).
Finalmente nos fuimos sobre las 2, 2-30 de la madrugada a casa.

Acerca de la forma de viajar de Ramón, se podría decir que es algo alocada, pues viaja a través de una asociación de estudiantes europeos, dónde no sabe con quién se va a cruzar, si va a dormir 8 días en un gimnasio, si comerá caliente en una semana... y esto es cierto, además que viaja solo, sin un compañero de fatigas, simplemente con lo que se encuentre cuando llegue.

Su próximo viaje espera que sea Orlando, el los Estados Unidos, allá donde está Disneyworld, el bueno, no esa mierda que nos quieren vender los franceses. Un lugar donde espera vivir y trabajar un año, no sé si más, y que si consigue ese visado, haré lo que pueda para ir a visitarle, pues esta persona en Estados Unidos, debe ser un show que no me quiero perder, y es una de las personas con la cual más me puedo divertir de cuanta gente conozco.

Ahora mismo, está a una o dos horas de embarcar en Barajas, y Ramón, un par de consejos:
-Si un hombre de origen griego, se te acerca mucho y te sonríe... ten cuidado porque es probable que no te vaya a pedir la hora precisamente.
-Si de camino a Serbia en el autobús, ves cosas metálicas de aspecto sospechoso en el suelo... ¡¡NO corras, Forrest!! Que puede ser peor

2 comentarios:

Anónimo dijo...

ains cuanto hecho de menos a ramon :(

Wild dijo...

Dile a tu amigo que le ENVIDIO.
Me encanta la gente con esa determinación, que parece alocada(pero tiene los pies en la tierra mas que cualquiera) que hace lo que en ese momento le apetece.
Ole sus Cojones!